Kurt Burneo, exministro de Economía y profesor investigador de Centrum Católica, refirió que una ejecución óptima de la inversión pública puede impulsar las inversiones mineras. Precisó que este año 2023 se pronostica que la inversión pública sea cero y las inversiones mineras caigan 16.6 puntos porcentuales. “En el caso de la inversión privada en general, el pronóstico para el 2023 es que la inversión minera cae en 16 puntos porcentuales. Hay una ligera recuperación de la inversión, pero la inversión privada en general es de 3.1. Por el lado de la inversión pública es cero”, indicó.
“En el Corredor del Sur, donde hay inversión minera, y existe canon y regalías, los indicadores de desarrollo territorial son bajos. Eso se debería a una baja ejecución de la inversión pública de 65% como promedio en el último decenio. Se privilegia el corto plazo y se descuida las inversiones a largo plazo”, apuntó en el Jueves Minero, organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).
Enfatizó que la inversión pública debe ser funcional a la inversión privada, pero lamentó que haya limitantes. “La inversión pública no es solamente fierro y cemento, básicamente también hay inversión. Y entonces un tema importante que vale la pena mencionar es que hay una relación funcional. Por ejemplo, cuando se construye un canal de regadío, los agricultores mejoran su productividad y se vuelven más competitivos y puede ingresar al radar un inversor”, expresó.
Añadió que el crecimiento de la inversión pública para el 2023 es cero a nivel nacional. “El problema es que la caída de las inversiones de los gobiernos subnacionales es tal que hace que la proyección de la inversión pública sea igual a cero. La inversión pública es un impulsor funcional de la inversión privada y no es una buena noticia que la inversión pública sea cero”, subrayó.
“El tema de expectativas está deteriorado y hace que la decisión de inversiones se ralentiza. La gente no tiene mucha seguridad respecto a qué pasará con sus inversiones. En el caso de las empresas es igual, si la expectativa es pesimista y no se ve una luz al final del túnel, la decisión se demora más. En el caso de la minería, desafortunadamente ha habido otro tipo de noticias que van a sustentar tener una tasa de crecimiento muy pequeña”, observó.
Adicionalmente, Kurt Burneo dio cuenta de que el país registra una inflación por encima del 8% y está dificultando la recuperación de los salarios, haciéndose más notorio en las ciudades del interior en comparación con Lima, lo que termina por perjudicar a aquellas zonas con presencia de actividad minera, como por ejemplo Puno, Cusco, Tacna, Arequipa y Moquegua.