El cobre tiene que llegar a US$ 12,000 la tonelada —un aumento del 20% desde el máximo de esta semana— para incentivar inversiones a gran escala en nuevas minas, señaló Olivia Markham, que coadministra el BlackRock World Mining Fund.
El precio del metal alcanzó un máximo de dos años cerca de los US$ 10,000, pero Markham sostiene que se necesitan más aumentos para alentar a las mineras a aprobar proyectos necesarios para evitar grandes déficits durante la transición energética.
“Cuando miro el precio actual, creo que está muy por debajo de los niveles de precios que necesitamos para incentivar nueva producción”, dijo Markham en una entrevista con la agencia Bloomberg. “Estructuralmente, necesitamos más unidades de cobre, y actualmente no veo que lleguen esos grandes bloques de nueva oferta”.
La demanda ha sido alarmantemente baja en China este año, pero ha surgido un amplio consenso de que el empeoramiento de la escasez de oferta minera puede impactar los precios.