En los escenarios más extremos de la geografía peruana, desde las alturas andinas hasta las profundidades selváticas, la Toyota Hilux ha demostrado ser mucho más que una camioneta: es una herramienta estratégica para las operaciones mineras. Con más del 50% de participación en su segmento y entre un 75% y 80% en minería, su confiabilidad, durabilidad y eficiencia la han consolidado como la pick-up predilecta del sector. David Caro, gerente de Asuntos Corporativos de Toyota del Perú, detalla cómo la Hilux evoluciona junto a las exigencias del país, alineándose con estándares de seguridad, sostenibilidad y tecnología que definen el futuro del rubro.
Una historia de liderazgo forjado en el trabajo duro
Hablar de minería en el Perú es hablar de un sector que opera bajo condiciones extremas, donde cada equipo debe estar a la altura de los desafíos del terreno, el clima y la eficiencia operativa. En este contexto, la Toyota Hilux no solo ha ganado protagonismo: se ha convertido en un símbolo de confiabilidad industrial.
Según David Caro, gerente de Asuntos Corporativos de Toyota del Perú, la Hilux representa más del 30% de las ventas de la marca a nivel nacional y mantiene una presencia dominante en los sectores productivos del país. “Aunque el segmento de pickups no es el más grande en términos absolutos, sí es estratégico. La Hilux ha sido el modelo más vendido en el Perú durante muchos años”, señala.
Un emblema de la minería moderna
La Hilux ha sido especialmente bien recibida por la industria minera, donde el 75% al 80% de las camionetas utilizadas pertenecen a esta línea. “Estuve recientemente en una operación minera en el sur del país, y el 95% de las camionetas en la flota eran Hilux”, comparte Caro. Este liderazgo no es accidental: responde a una combinación de atributos técnicos y una estrategia de servicio posventa que responde directamente a las… Sigue leyendo gratuitamente esta entrevista en nuestra edición especial por el PERUMIN 37 aquí.