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Cerro Verde planea cerrar operaciones en planta de chancado-hidro ante necesidad de seguir incrementando tamaño del tajo

En Cerro Verde el mineral de cobre y molibdeno se extrae del tajo integrado Cerro Verde-Santa Rosa y el tajo Cerro Negro.

Sociedad Minera Cerro Verde tiene planificado para este año el cierre de operaciones de la planta de chancado-hidro ante la necesidad de seguir incrementando el tamaño del tajo, según adelantó el gerente de Servicios Compartidos y Centro de Excelencia, Manuel Aragón.

En la conferencia magistral «Gestión del centro de excelencia para el soporte a las operaciones de las plantas concentradoras de Cerro Verde», el representante declaró que “la planta de chancado-hidro cerrará operaciones este año (…) porque el tajo tiene que seguir creciendo y justamente en la zona donde está ubicada [la planta]”.

Además, en el evento organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú – Seccional Arequipa, sostuvo que la decisión del cese de las operaciones de la planta de chancado-hidro se ve reforzado porque “las reservas de mineral chancado para lixiviar ya se agotaron”.

Pese a la pronta terminación de la planta de chancado-hidro, destacó que esta “va a cumplir un récord de más de diez años sin incidentes”, lo que, desde su perspectiva, demuestra que ser exitosos y tener cero lesiones en la industria minera es posible.

Eso sí, aclaró que el proceso de lixiviación en pilas de mineral ROM, intercambio iónico y electrodeposición “continuará por todo el tiempo de vida de Cerro Verde”.

En Cerro Verde el mineral de cobre y molibdeno se extrae del tajo integrado Cerro Verde-Santa Rosa y el tajo Cerro Negro, para después ser derivado a las plantas concentradoras como al proceso chancado-hidro de lixiviación y al proceso de Run of Mine.

Flotación inteligente

Asimismo, Manuel Aragón señaló que se está aplicando la inteligencia artificial en el proceso de flotación de Cerro Verde para analizar las características geológicas de la roca mineralizada, como la variabilidad del mineral, las alteraciones y litologías y los contenidos de arcilla.

“Las metas de recuperación son vulnerables especialmente a altos tonelajes. Entonces, se generan cantidad de datos infinitas y esa gestión de datos no es fácil hacerla con las herramientas tradicionales que hemos podido conocer”, explicó.

Por tal motivo, remarcó que, al cabo de un determinado de período de implementación, la inteligencia aprenderá a gestionar los datos por sí sola y advertir al usuario el ingreso de material mineralizado con las características requeridas para su procesamiento.

Un error

De otro lado, Manuel Aragón se refirió al reciente ciberataque contra Freeport-McMoRan, el principal accionista de Cerro Verde, por el cual sus sistemas informáticos fueron comprometidos y su producción impactada de manera limitada.

Para el especialista, “esa falla no se puede repetir de aquí a dos o cinco años”, pero “lo que normalmente ocurre es que se pueda volver a dar”, debido a que “cambian las personas, los procedimientos o cualquier otro documento que respalde cómo se resuelve un problema”.

En ese sentido, reflexionó que en estos tiempos existe tanta información y capacidad de almacenamiento, que es imprescindible “guardarla en el lugar exacto y asegurar el mecanismo que garantice que siempre se va a usar la información más adecuada”.