Según un reciente informe, la minería ilegal de oro es la actividad productiva ilícita que mueve más dinero al año en el Perú, representando US$ 1,777 millones y ocupando 25 millones de hectáreas en regiones como Arequipa, Puno, Madre de Dios, Ayacucho, Apurímac y La Libertad.
Con el objetivo de abordar esta situación, PERUMIN Convención Minera dedicará un segmento especial para el análisis, debate e intercambio de experiencias en torno a propuestas que coadyuven a la erradicación de la minería ilegal y promuevan la formalización de la economía.
Así lo anunció durante una entrevista con el medio regional Sol TV, el flamante presidente de PERUMIN 36, Ing. Miguel Cardozo, quien enfatizó que el Estado peruano debe ser el principal interesado en prohibir la minería indebida y encaminar alternativas de desarrollo sostenible.
“PERUMIN 36 contará con un espacio orientado a la discusión y reflexión de las propuestas vinculadas con el control y el desmantelamiento de las prácticas ilegales en la minería”, comentó sobre el evento a realizarse del 25 al 29 de setiembre en el Centro de Convenciones Cerro Juli.
El también director del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú señaló que la otra cara de la moneda es el sector minero formal, que contribuyó en el presente siglo a la reducción de la pobreza a 20%, cifra que podría reducirse con la materialización de operaciones mineras.
Justamente, recordó que nuestro país posee un portafolio de 47 proyectos mineros próximos o en etapa de construcción, con una inversión conjunta superior a 53 mil millones de dólares y repartidos en al menos 17 regiones, de acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas.
“La minería formal es un potente motor para crecimiento económico, creación de empleo y dinamización de otros sectores productivos a partir de vínculos con nuestra industria. Estamos hablando de un desarrollo económico liderado por la minería, pero diversificado”, acentuó.
Sin embargo, remarcó que el cierre de brechas sociales, sobre todo en zonas rurales y de difícil acceso, no solamente dependerá de los recursos económicos del sector minero, sino también de la correcta planificación y gestión del gasto público por parte de los gobiernos locales.
De esta manera, pese a su milenaria tradición minera y abundante riqueza geológica, lamentó que la región Cajamarca registre una pobreza cercana al 40%, teniendo a la provincia de San Marcos con la menor ejecución del 36% del canon y regalías mineras durante el año 2021.
“Si recibo 100 soles, debo utilizar todo o la mayor parte. Se trata de un problema de falta de capacidades de las autoridades y merece una solución. Como industria, queremos apoyar a que estas inversiones se cumplan y respondan a un plan que beneficie a la población”, declaró.