El lema de proEXPLO es “Descubriendo recursos minerales para un mundo mejor” y lo que quiere resaltar es la importancia de las exploraciones y de descubrir nuevos recursos para poder seguir aumentando la producción de los países es crucial. Necesitamos poner sobre la mesa los principales desafíos del sector como la complejidad de los permisos de exploración, demoras en el acceso a derechos de superficie, y la lucha contra la minería informal e ilegal. Dialogamos con Walter Tejada, presidente del congreso proEXPLO 2025.
¿El Perú ha perdido brillo como plaza para las inversiones en exploración minera? ¿Cuáles serían las razones?
La minería es una actividad clave para el crecimiento económico y desarrollo del Perú. Esta representa alrededor del 12% de nuestro PBI, más del 60% de las exportaciones nacionales y 1.4 millones de empleos entre directos e indirectos aproximadamente, de acuerdo con el último Boletín Estadístico Minero del Ministerio de Energía y Minas (Minem).
Para 2025, se prevé que el PBI minero del Perú crezca un 2,6%, impulsado por un aumento en la producción de cobre. Para que esta cifra siga aumentando y la economía peruana siga creciendo, es fundamental seguir explorando los recursos que nos permitirán desarrollar el país y apoyar la transición energética que el mundo necesita.
Pero, sobre todo, el Perú tiene un inmenso potencial geológico que se sustenta en una geología muy diversa, con varios tipos de yacimientos y diferentes minerales. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), nuestro país es líder en reservas minerales como plata, cobre y oro en América Latina y el mundo. Y en los últimos tres años hemos visto un incremento gradual pero sostenido en la inversión en exploración, habiendo cerrado el 2024 con US$568 millones ejecutados.
Por estas razones no diría que el Perú ha perdido brillo. De hecho, nuestro país sigue siendo uno de los principales destinos que atrae más inversión en exploración minera en el mundo.
Lo que ha sucedido es que el Perú ha tenido una caída en los rankings de competitividad en los últimos años debido principalmente a la inestabilidad política-social y sobre todo a desafíos a nivel administrativo. En el país debemos agilizar los procesos normativos y permisos para la ejecución de proyectos, tanto de exploración como de construcción minera. Esos procesos en el Perú son más complejos y demoran mucho más tiempo que en otros países mineros como Canadá, Chile o Australia. A pesar de eso seguimos siendo un destino atractivo para las inversiones gracias a nuestra riqueza mineral y el gran valor que tienen estos recursos en el mundo, hoy impulsado por la transición energética.
De igual manera, hay que recalcar que Perú tiene un esquema… Puede seguir leyendo la entrevista en nuestra edición 118 aquí.