La refinería de Talara, con capacidad para procesar 95,000 barriles de petróleo por día, estará plenamente operativa antes de que concluya el 2023, anunció este martes el presidente del directorio de la empresa estatal de Petroperú, Pedro Chira.
“La refinería debe estar a la capacidad plena en diciembre del 2023”, afirmó Chira en una rueda de prensa con la Asociación de Prensa Extranjera en Perú (APEP).
En este sentido, detalló que, en las próximas dos semanas, estarán “completando ya las pruebas de garantía que nos permitan tener el 100 % de la refinería trabajando a plena producción”.
Posteriormente comenzará a operar a plena capacidad, algo que debe culminar durante este mes de diciembre.
Importación de crudo
Con respecto al suministro de 95,000 barriles para refinar ratificó que “la producción nacional no es suficiente”, por lo que necesitará “continuar comprando el resto de producción”.
“El nivel de importación de crudo continuará en los niveles de 60,000 a 65,000 barriles por día”, comentó.
Chira recordó que, “antes de arrancar la refinería”, era necesario comprar crudo y combustibles.
“Lo que más hacía daño a nuestra economía son los combustibles, porque dentro de un mercado altamente competitivo (…) en muchos casos perdíamos dinero importando combustibles, pero teníamos un mercado que abastecer, para nosotros eso es prioritario”, agregó.
A partir de ahora, “la cantidad de combustibles a importar va a disminuir drásticamente”, si bien van a “tener un pequeño volumen siempre de importación” por la demanda del mercado nacional, acotó.
“Hay una porción de alrededor de 15,000 a 20,000 barriles por día de combustibles, que va a tener que seguir importando Petroperú“, precisó.
En cuanto al crudo, serán entre 60,000 y 65,000 barriles “para convertirlos en productos refinados de alto valor”.
Al respecto, Chira aseguró que no operan “con contrato de largo aliento para el abastecimiento” de petróleo, sino que acceden “a la oferta y demanda que hay en el mercado a través de los traders de petróleo”.
Estándares de calidad
Petroperú anunció a fines de agosto pasado que la refinería de Talara había quedado lista para procesar 95,000 barriles de petróleo por día, tras completar los procesos de craqueo catalítico y flexicoking (refinación basada en el craqueo térmico de los residuos pesados), y procedería a la venta de gas licuado de petróleo (GLP) a partir de septiembre en el norte del país.
La petrolera señaló que había concluido las maniobras de arranque de las unidades más importantes de la refinería, cuyo proceso de modernización tomó varios años y una inversión superior a los 5,000 millones de dólares.
Las nuevas unidades de proceso permiten convertir el residual de los crudos pesados en productos de mayor demanda y de alto valor comercial, dado que se ciñen a “estrictos estándares de calidad” y aseguran una mayor rentabilidad, indicó.
La nueva refinería de Talara no depende de ningún tipo de crudo pesado en específico, dado que está preparada para procesar los distintos tipos que existen en el mercado peruano e internacional, precisó la empresa.
En ese momento también anunció que la comercialización de GLP en el norte del país comenzaría “cuando se tengan los inventarios correspondientes”, en setiembre pasado.