El Smart Energy Summit 2025 se convirtió en un espacio clave para analizar el futuro del sector eléctrico peruano, con un enfoque en la política energética y la evolución de los servicios complementarios hacia 2030. El conversatorio reunió a líderes del sector público, regulador y sociedad civil: José Meza, director de Eficiencia Energética del Ministerio de Energía y Minas; Severo Buenalaya, gerente de Generación y Transmisión Eléctrica de Osinergmin; Raquel Carrero, gerente general de la Asociación Peruana de Energías Renovables; y moderado por Alfredo Vivanco, presidente de Perú Renovable.
Desde la perspectiva del Minem, José Meza destacó que la actualización de la política energética al 2050 está en proceso, con un enfoque integral sobre el sistema energético, cuya electricidad representa apenas un 25% del consumo nacional, mientras que la matriz global aún depende en un 65% de hidrocarburos. Meza subrayó cinco pilares estratégicos para la transición energética: eficiencia energética, energías renovables, electrificación de la economía, hidrógeno verde e innovación tecnológica. Resaltó la necesidad de una planificación dinámica y articulada, y recordó que, aunque Perú no cuenta actualmente con un plan energético oficial aprobado, se trabaja en su formulación con la meta de consolidarlo hacia mediados del próximo año.
Desde el regulador, Severo Buenalaya puso el foco en los retos de confiabilidad que implica el incremento de generación renovable. Actualmente, el país cuenta con alrededor de 2000 MW de generación renovable no convencional, cifra que se proyecta casi duplicar hacia 2030, alcanzando un 30% de participación en la matriz. Buenalaya enfatizó que el aumento de energías variables requiere fortalecer los servicios complementarios, incluyendo almacenamiento y sistemas de respuesta rápida, para mantener la robustez del sistema frente a posibles fallas. Asimismo, destacó la importancia de señales económicas claras para incentivar la inversión en tecnologías que aseguren potencia firme y confiabilidad a largo plazo.
Raquel Carrero, desde la perspectiva del mercado, coincidió en que la transición energética eficiente no es posible sin transmisión y servicios complementarios robustos. Subrayó que, pese a existir leyes que promueven la creación de un mercado de servicios complementarios, los reglamentos aún no se han implementado plenamente, lo que limita la competitividad y eficiencia del sistema. Carrero hizo un llamado a priorizar la creación de un mercado formal que permita ofrecer diversidad de soluciones, reducir costos y garantizar la seguridad del sistema, evitando impactos innecesarios en la tarifa final para los usuarios.
A modo de síntesis, Alfredo Vivanco evidenció que los próximos cinco años serán críticos para consolidar la transición energética peruana. La combinación de planificación estatal, regulación adecuada y participación activa del mercado permitirá no solo incrementar la participación de energías renovables, sino también fortalecer la confiabilidad y eficiencia del sistema eléctrico, posicionando a Perú frente a la electrificación y descarbonización de su economía hacia 2030.