La Ley Orgánica de Hidrocarburos (LOH), Ley N.° 26221, promulgada en 1993, fue pionera en la apertura del sector a la inversión privada en Perú. Sin embargo, su marco de tres décadas es hoy un ancla que compromete la seguridad energética y la competitividad del país. Un análisis exhaustivo revela que las deficiencias regulatorias, fiscales y contractuales están obstaculizando la inversión exploratoria y la maximización del valor de los recursos, haciendo urgente una reforma propositiva.
EL COSTO DE LA INEFICIENCIA ADMINISTRATIVA: SIETE AÑOS DE ESPERA
Uno de los mayores frenos a la inversión es la extrema lentitud en la obtención de licencias y permisos, un proceso burocrático que puede superar los siete años. A pesar de los esfuerzos del Minem, este plazo es insostenible para una industria que requiere predictibilidad y… Sigue leyendo la columna de opinión en nuestra edición Energiminas 122 aquí.
 
								 
				 
															 
								 
								 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
						
							
		 
								