La mina Quellaveco, operada por Anglo American en la región de Moquegua, se ha convertido en uno de los principales referentes de minería moderna en el Perú y América Latina, señaló Isidro Oyola, gerente general de la mina, durante su exposición en la primera jornada de proEXPLO 2025.
Oyola destacó las cifras obtenidas por Quellaveco gracias a sus procesos de automatización y transformación digital. En 2024, Quellaveco aportó el 1% del PBI nacional, un dato que refleja el impacto económico de esta inversión. En palabras de Isidro Oyola, gerente general de Quellaveco, “estamos posicionando a Quellaveco como la mina autónoma de mayor rendimiento entre otras de su categoría”, concluyó.
“Future Smart Mining es la estrategia de Anglo American que busca usar la tecnología como una herramienta para buscar permanentemente la innovación en todos los procesos de la operación, lo que nos permite permanentemente estar buscando mejora continua a lo largo de todos nuestros proyectos”, señala Isidro Oyola.
Durante ese mismo año, Quellaveco produjo 306 mil toneladas de cobre fino, trasladando su concentrado desde la planta ubicada en la zona de mina hasta el puerto de Ilo a través de una carretera de 250 km, utilizando camiones encapsulados. En total, embarcaron 1.2 millones de toneladas de concentrado, consolidando su posición en el mercado global del cobre.
Uno de los grandes diferenciales de Quellaveco es su flota de 32 camiones autónomos, la primera de su tipo en el país. Estos equipos no solo incrementan la productividad, sino que también han permitido evitar la emisión de 123 mil toneladas de dióxido de carbono en 2024.
A través de la presa Vizcachas, de 60 millones de m³ de capacidad, la minera capta agua no apta para consumo del río Titire (de origen volcánico) y se compensa devolviendo agua limpia a Moquegua y al valle del Tambo.
En cuanto a talento humano, Quellaveco impulsa una transformación en la industria: 23% del personal es femenino, y casi 40% de los cargos directivos están ocupados por mujeres, cifras muy superiores al promedio nacional de entre 6 y 7%. Esta inclusión ha sido posible gracias a la digitalización, que permite nuevos perfiles y capacidades.