A partir del 1 de enero de 2026, ENGIE dejaría de producir energía en base a carbón en Chile. Así lo comunicó a la Comisión Nacional de Energía (CNE) al solicitar la autorización del cese de operaciones de las unidades Central Termoeléctrica Andina (CTA) y Central Termoeléctrica Hornitos (CTH), ubicadas en el Complejo Térmico de Mejillones (CTM), para el 31 de diciembre de 2025.
Esta información se suma a las diversas acciones que está realizando la compañía para dar cumplimiento a su compromiso de salir del carbón en 2025. En marzo de este año, la CNE autorizó la reconversión de Infraestructura Energética Mejillones (IEM) a gas y el retiro y desconexión de las unidades 1 y 2 del CTM.
“Esta comunicación a la autoridad demuestra nuestro compromiso como compañía con el plan de descarbonización. La transformación que lideramos implica el retiro de unidades, pero también el desarrollo de nuevos proyectos de reconversión que son fundamentales para la transición energética. Además, estamos construyendo parques de energía renovable y sistemas de almacenamiento de energía basados en baterías, lo que proporciona flexibilidad al sistema”, explicó Rosaline Corinthien, CEO de ENGIE Chile.
En conjunto, CTA y CTH tienen una capacidad instalada de 350 MW y se encuentran operativas desde 2011.
En septiembre de 2022 la compañía desconectó su última unidad a carbón del Complejo Térmico de Tocopilla (CTT) y, tras este anuncio, el 31 de diciembre de 2025 saldría de la generación a carbón de forma definitiva.