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CCUS es una tecnología clave para afrontar el cambio climático

 “La captura, utilización y almacenamiento de carbono (CCUS) deberá constituir un pilar clave de los esfuerzos para poner al mundo en el camino hacia las emisiones netas cero”

Hoy en la sede del FPEG, SE Mohamed Hamel, Secretario General del Foro de Países Exportadores de Gas, enfatizó el papel crucial del CCUS en la lucha contra el cambio climático.

Afirmó: “CCUS es una tecnología clave para mitigar el cambio climático. Descartar el CCUS como no esencial para la mitigación del cambio climático es, como mínimo, un error. Me recuerda un error de cálculo similar cometido hace dos décadas cuando el mundo se estaba quedando sin petróleo. “

En este sentido, vale la pena recordar el informe ‘CCUS in Clean Energy Transitions’ de la AIE publicado en septiembre de 2020 ( CCUS in Clean Energy Transitions – Analysis – IEA ), y resaltar algunos puntos clave del informe:

  •  “La captura, utilización y almacenamiento de carbono (CCUS) deberá constituir un pilar clave de los esfuerzos para poner al mundo en el camino hacia las emisiones netas cero”
  • “Alcanzar el cero neto será prácticamente imposible sin CCUS”
  • “Con un amplio almacenamiento disponible, el éxito dependerá de contar con la infraestructura adecuada”
  • “La acción gubernamental en esta década es crucial”
  • “Cuatro prioridades de alto nivel para los gobiernos y la industria acelerarían el progreso de CCUS durante la próxima década: 
  • Crear las condiciones para la inversión valorando la reducción de emisiones y el apoyo directo a los primeros proyectos CCUS.
  • Coordinar y financiar el desarrollo de centros industriales con infraestructura de CO2 compartida.
  • Identificar y fomentar el desarrollo del almacenamiento de CO2 en regiones clave.
  • Impulsar la innovación para reducir costos y garantizar que las tecnologías emergentes críticas se vuelvan comerciales, incluso en sectores donde las emisiones son difíciles de reducir y para la eliminación de carbono”.

SE Hamel concluyó: “abordar múltiples desafíos, como sacar a las personas de la pobreza, proporcionar cocina y calefacción limpias a 2.300 millones de personas que carecen de ellas, garantizar el acceso a electricidad confiable, impulsar el crecimiento económico, mejorar la prosperidad, mejorar los niveles de vida en los países en desarrollo, reducir el uso interior de los hogares La contaminación y la mejora de la calidad del aire en las zonas urbanas, y al mismo tiempo abordar al mismo tiempo el cambio climático y el trilema energético, requieren un enfoque multifacético.

No existe una solución única; todas las energías y tecnologías son esenciales. A medida que nos acercamos a la COP28, es importante recordar que, según el Acuerdo de París, las contribuciones de cada país a la acción climática se determinan a nivel nacional, a la luz de sus circunstancias y capacidades únicas. No es apropiado dictar a otros lo que deben hacer. Los principios de equidad, responsabilidades comunes pero diferenciadas y capacidades respectivas, deben seguir siendo la piedra angular de todas las acciones.”