El año pasado, mientras que la inversión en explotación (producción de hidrocarburos) continuó su reactivación, la inversión en exploración siguió con dificultades para retomar sus niveles de 2018-2020, cifras que de por sí eran bajas, señala el Informe InfoGAS Perú 2023, presentado por Promigas Perú y Quavii.
Durante el 2022, las inversiones en explotación de gas natural ascendieron a US$ 275 millones (+2%); y las inversiones en exploración fueron de solo US$ 2 millones (-35%).
“Lamentablemente, las empresas han abandonado casi por completo la búsqueda de nuevos yacimientos que permitan la reposición de las reservas. La cifra de pozos confirmatorios y exploratorios perforados no hace más que confirmar esta realidad, 13 en el último lustro y solo dos en los últimos tres años”, señala el informe, al puntualizar que este comportamiento se presenta pese al aumento de la demanda por el combustible.
Esta situación ha derivado en que, al cierre del 2022, las reservas probadas de gas natural llegaran a 8.775 GPC (gigapiés cúbicos), por debajo de las 9.259 GPC del 2021. Según el reporte, de mantenerse el nivel de producción anual del último año y de no haber ningún tipo de incorporación de nuevas reservas probadas, el país tendría un suministro asegurado para 18 años. “Este índice presenta una disminución de 1,3 años con respecto al año anterior, dado el aumento en la producción que se presentó en el 2022 frente al 2021 y la no incorporación de reservas probadas en ese periodo”.
En torno a la infraestructura de transporte del gas natural, necesaria para la masificación del recurso, el informe indica que, desde hace varios años, continúa sin evolución, a la espera de la definición del Gobierno del macroproyecto Gasoducto Sur Peruano.
No obstante, se indica que hoy existe la oportunidad de establecer una infraestructura sólida de transporte mediante la implementación de dos proyectos: el Gasoducto Costero al Sur y el Gasoducto al Norte.