La minera Minsur, una de las más importantes productoras de estaño del mundo, informó que durante el primer trimestre del año, la producción de este metal, en su forma refinada estuvo por debajo del mismo período del año anterior (-54%) debido a la menor cantidad de días de operación, producto de la paralización preventiva de las operaciones por la coyuntura social y política en la región de Puno.
La producción de estaño contenido en San Rafael alcanzó las 1,455 toneladas (-73% vs. 1T22) y la producción de B2 superó apenas las 680 toneladas (-49% vs. 1T22); ambos yacimientos fueron impactados por la menor cantidad de días de operación producto de la coyuntura social y política en Puno
Dijo Minsur que las ventas y el ebitda fueron menores en 59% y 89%, respectivamente. Las menores ventas se explican por el menor volumen vendido (-51%) y menor precio del estaño (-39%), compensado parcialmente por un mayor volumen vendido de oro (+14%). Finalmente, la utilidad neta fue de US$ 61.8 millones frente a los US$ 206.7 millones del mismo lapso del año pasado, explicado principalmente por la parada preventiva y el menor resultado de su subsidiaria Cumbres Andinas, que opera Mina Justa.
A mediados de enero, el Gobierno peruano declaró el estado de emergencia en determinadas regiones del país por un periodo de 30 días, con la finalidad de contener las movilizaciones, bloqueo de vías y conflictos sociales que han ocurrido en estas regiones y que originaron sensibles acontecimientos, sumados en algunos casos al impedimento regular del comercio y la continuidad de las actividades productivas de la zona, siendo una de las regiones más afectadas la región Puno.
Como consecuencia del duelo regional decretado como resultado de estos acontecimientos, la compañía tomó la decisión de paralizar temporalmente sus operaciones productivas de la unidad minera San Rafael el 12 de enero. Durante marzo pudo retomar la producción de forma progresiva en la unidad minera San Rafael, que a la fecha opera en condiciones normales.