La minera Vale, una de las más importantes productoras de mineral de hierro del mundo, anuncia que por primera vez logró producir pellets de calidad comercial a escala industrial sin utilizar carbón antracita. En una prueba realizada en una planta de pélets en Vargem Grande, Minas Gerais, Vale reemplazó el 100% del combustible fósil con biocarbono para quemar los pélets (pequeñas bolas de mineral de hierro utilizadas para fabricar acero). El biocarbono es un producto renovable y de cero emisiones obtenido por carbonización de biomasa.
El carbón antracita representa alrededor del 50% de las emisiones de dióxido de carbono en la producción de pélets, que es el proceso más intensivo en carbono de Vale en términos de emisiones directas de la empresa. Hoy, la peletización representa el 30% del total de las emisiones de Alcance 1 de Vale. La prueba comenzó reemplazando el 50% del carbón con biocarbono, antes de aumentar gradualmente hasta el 100%. En total, se produjeron aproximadamente 50.000 toneladas métricas de pellets, de las cuales 15.000 toneladas se produjeron utilizando biocarbono 100% certificado.
Según el ingeniero Rodrigo Boyer, quien lideró la iniciativa, el uso de biocarbono solo en la planta de pélets de Vargem Grande reducirá las emisiones anuales de dióxido de carbono en aproximadamente 350.000 toneladas métricas, equivalentes a las emisiones anuales de aproximadamente 75.400 autos pequeños de 1 litro. “Se realizarán más pruebas en 2023, de mayor duración, para evaluar a fondo el proceso. Recién luego de esta etapa podremos generar información para el desarrollo de los trabajos de ingeniería necesarios encaminados a la implementación definitiva de este proyecto”, explica.
El gerente ejecutivo de proyectos de descarbonización de Vale, Rodrigo Araújo, dice que la prueba es otro paso importante en el camino de la empresa, en línea con su compromiso de alcanzar cero emisiones netas de carbono de alcance 1 y 2 para 2050. El alcance 2 se refiere a las emisiones indirectas de las compras de electricidad. . “En el caso de la peletización, el uso de biocarbono es nuestra principal iniciativa, debido a que existe un gran potencial para la producción de biomasa en Brasil”, dice.
Vale está invirtiendo entre US$ 4 mil millones y US$ 6 mil millones para reducir sus emisiones directas e indirectas en un 33% para 2030, de conformidad con el Acuerdo de París, y con el objetivo de llegar a cero neto en 2050. Además, para 2035, la empresa está se comprometió a reducir sus emisiones de Alcance 3, relacionadas con su cadena de valor (es decir, proveedores y clientes), en un 15%.
“La agenda climática es una prioridad para Vale. Por ejemplo, desde 2020, la empresa adoptó un precio interno del carbono de US$ 50 por tonelada métrica de CO2 equivalente al evaluar la asignación de capital en nuevos proyectos”, dice Rodrigo Lauria, gerente ejecutivo de cambio climático de Vale.