Los oleajes y ráfagas de viento anómalos vienen afectando la costa peruana durante la última semana, generando interrupciones en el flujo regular del ingreso de buques a los puertos, ocasionando incluso, en varias oportunidades, el cierre parcial y temporal de los mismos, explicó la Sociedad Peruana de Gas Licuado de Petróleo (SPGL).
“Esta situación impide la descarga regular de buques con gas licuado de petróleo (GLP) en la zona del Callao, lo que afecta el flujo de recepción y, por lo tanto, el despacho de GLP en las plantas de Abastecimiento”, explicaron en un comunicado.
La SPGL coordina con las autoridades portuarias y monitorea la situación climática para mitigar el impacto en los consumidores. Como consecuencia de esta situación, la demanda en Pisco y Talara se viene incrementando, especialmente en Pisco por la cercanía a Lima.
Las empresas del sector están desplegando acciones para minimizar los efectos de esta problemática y normalizar la dinámica de los despachos de forma progresiva, segura y ordenada.
“Esta coyuntura pone nuevamente en evidencia la necesidad urgente de fortalecer y ampliar la infraestructura de almacenamiento de GLP en el país que, junto a un necesario marco normativo moderno, ágil y de largo aliento, permitirán responder de manera eficiente ante eventos climáticos o interrupciones logísticas como las que atravesamos”, dijo la SPGL.