El ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, acompañado de la presidenta de la República, Dina Boluarte, supervisó las labores de construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, que actualmente presenta un avance cercano al 80%.
“Esta es una obra muy importante que representa una inversión de más de US$ 2,000 millones. Con el inicio de operaciones, entre finales de año o inicios del próximo, la capacidad para atender pasajeros va a duplicarse, de 15 a 30 millones”, detalló el titular del MTC.
El ministro Pérez Reyes también indicó que el nuevo terminal tendrá el doble de mangas para aviones, lo que permitirá gestionar los vuelos de forma más eficiente. Asimismo, recalcó que, entre octubre y diciembre de 2025, se ampliará la capacidad para atender a 40 millones de pasajeros al año.
“En diciembre de este año o enero del 2025 va a haber un proceso de mudanza hacia este aeropuerto. Entonces, tenemos que asegurarnos que, cuando esto ocurra, todos los servicios del Gobierno estén implementados y operativos, de forma tal que los ciudadanos puedan utilizarlo y disfrutarlo”, puntualizó.
Además, señaló que desde el MTC se está coordinando con diferentes dependencias del Estado, como Migraciones, Aduanas, Sunat, Senasa, Dirandro, entre otras, a fin de agilizar la implementación de todos los servicios en el nuevo aeropuerto, previo a su inicio de operaciones.
El objetivo de este nuevo terminal aéreo es convertir al país en el principal hub comercial, logístico y turístico de Latinoamérica. Además, será tres veces más grande que el actual, con dimensiones similares a todo el distrito de Miraflores.
“Estamos dando pasos importantes en la construcción de obras de infraestructura, obras que impulsan el progreso del país. Acabamos de verificar que se ha avanzado cerca del 80%. Esta obra colocará al Perú dentro los cinco aeropuertos de la región con mayor capacidad para albergar pasajeros”, mencionó la jefa de Estado, Dina Boluarte.
El nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez contará con un moderno terminal de pasajeros, dos pistas de aterrizaje y una torre nueva de control. También, hoteles, locales comerciales, una zona de carga, un parque logístico, una planta de combustible que triplicará su capacidad actual y una amplia zona de estacionamientos.