El cambio climático representa uno de los mayores desafíos de nuestra era. Hasta mediados del siglo XX, las emisiones de dióxido de carbono eran relativamente bajas. Sin embargo, con el auge de la Revolución Industrial, para 1990 estas emisiones se habían cuadruplicado, alcanzando los 20 mil millones de toneladas. En 2023, el mundo emitió cerca de 40 mil millones de toneladas de CO₂. Frente a esta creciente amenaza, una de las soluciones más prometedoras es la Captura y Almacenamiento de Carbono (CAC).
En este contexto, la Agencia Internacional de Energía (AIE) destaca que la tecnología CAC desempeña un papel crucial en la reducción de emisiones globales. Según la AIE, alcanzar los objetivos del Acuerdo de París sin esta tecnología sería prácticamente imposible [2, 3].
La finalidad de esta tecnología es impedir que el CO₂ llegue a la atmósfera, mitigando el efecto invernadero. La tecnología CAC se… Puede seguir consultando esta consulta en nuestra edición 119 aquí.