William Martínez, especialista en geología económica de la Dirección de Recursos Minerales y Energéticos del Instituto, Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet), afirmó que nuestro país debe aprovechar la demanda mundial de cobre e informó sobre las características de metalotectos de Toquepala, Yarabamba e Incapuquio y su relación con los yacimientos minerales tipo pórfidos de cobre-molibdeno. La predicción y descubrimiento de estos yacimientos de pórfidos de cobre-molibdeno, dijo, es crucial para satisfacer la creciente demanda mundial de cobre, que se triplicará para el 2050.
Señaló que en la costa sur de Perú se encuentran rocas de los periodos Jurásico y Cretáceo-Paleógeno, que tienen características geológicas importantes. Estas incluyen metalotectos volcánicos del Grupo Toquepala, fallas estructurales como el sistema de fallas Incapuquio y litodémicos de las superunidades Yarabamba y Tiabaya. Estas unidades se desarrollaron a partir de la evolución de un magmatismo calcoalcalino, manteniendo patrones de subducción, transtensión y extensión.
El estudio destaca la importancia del sistema de fallas Incapuquio como canalizador del magmatismo, lo que precedió a las mineralizaciones de la región, especialmente a los depósitos de pórfidos de Cobre-Molibdeno. La investigación busca aportar nuevos conocimientos sobre los metalotectos del grupo Toquepala, Yarabamba e Incapuquio en términos paleo-tectónicos y paleo-magmáticos. Además, pretende predecir objetivos de exploración utilizando herramientas avanzadas como la Inteligencia Artificial.
Martínez afirmó que el Perú, con su enorme potencial geológico, debe aprovechar esta oportunidad: “Se deben de poner en marcha, a mediano plazo, importantes proyectos y la exploración de nuevos sistemas porfiríticos para sustituir minas centenarias como Cuajone, Toquepala y Cerro Verde”.