Juan Miguel Cayo, presidente del Comité Eléctrico de la SNMPE, explicó a El Comercio que su institución “está a favor de promover las energías renovables. Es más, nuestras empresas agremiadas son las principales operadoras de energías renovables en el país”.
Para el experto,uno de los problemas en el sector eléctrico es la norma y, por tanto, el proyecto de ley (dictamen PL 2139, 3662, 4565, 4748) que busca promover la energía solar como mecanismo para reducir las tarifas eléctricas no es la solución. “Lo que pasa es que los actuales contratos acoplan potencia con energía, pero lo que busca el proyecto de ley es que los nuevos contratos sean solamente por energía”, dijo. “Entonces, van a coexistir contratos con potencia y contratos sin potencia. Eso generará un problema de estabilidad jurídica a las empresas que tienen contratos ya firmados.
“Lo que puedo decir es que el proyecto de ley intenta establecer como las renovables podrán participar en las licitaciones del mercado regulado. Pero no habrá nuevas licitaciones hasta el 2026, por lo menos. Entonces, si el proyecto de ley se llega a aprobar hoy mismo, ese efecto no se dará sino hasta el 2026 o más allá. Quien diga que las tarifas van a bajar en el corto plazo está vendiendo humo”, dijo en entrevista con el citado medio.
A juicio de Juan Miguel Cayo, el ingreso de las energías renovables va a desplazar, en el tiempo, a las centrales térmicas. “Esa es una realidad inexorable. Y eso va a hacer que se consuma menos gas. Pero va a ser un proceso paulatino”. En tanto, dijo, la energía térmica va a ser fundamental en el proceso de transición energética, porque las renovables son intermitentes. “Esto significa que se seguirá requiriendo a las centrales térmicas, que son las que dan flexibilidad y respaldo al sistema en las horas [de la noche] en que las plantas térmicas no producen energía”.