Dos toneladas de residuos sólidos fueron recolectados durante cinco jornadas de limpieza de playas promovidas por el programa Brigada Ambiental Comunitaria de Southern Perú, en Ilo, región Moquegua. Además, se sensibilizó a más de 2,500 familias sobre la importancia de preservar el ambiente y disponer correctamente los residuos no aprovechables.
La campaña “Yo amo mi playa limpia”, que se ejecuta en alianza con la Municipalidad provincial de Ilo y la Municipalidad distrital de Pacocha, inició el jueves 26 de enero en el Malecón Costero, donde se intervino un área de tres kilómetros logrando recoger media tonelada de basura que fue pesada y trasladada al botadero municipal.
Posteriormente se hizo lo propio en las playas: Enfermeras y Jaconcillo, Gramadal y Puerto Inglés, donde hubo limpieza, sensibilización a veraneantes y distribución de guantes y bolsas biodegradables a lo largo de tres kilómetros de playas.
La quinta jornada realizada el 18 de febrero en playa Pozo de Lizas cubrió un área total de cinco kilómetros, logrando sensibilizar a un aproximado de 1000 familias gracias al trabajo conjunto de voluntarios de los programas de Southern Perú, entre ellos: Escuela de Líderes, Brigada Ambiental Comunitaria, Programa Protege y promotores ambientales de la Municipalidad Provincial de Ilo y población en general.
Se desarrollaron también actividades deportivas y de recreación orientadas a generar conciencia en los participantes sobre la necesidad de mantener y cuidar los espacios públicos.
Cada campaña de limpieza convoca la participación de diferentes organizaciones sociales de Ilo entre ellas: Capitanía de puerto, Vaso de Leche, Juntas vecinales de Pacocha, organización juvenil Progreen, Voluntariado corporativo de SPCC, Centro del Adulto Mayor (CIAM) Miramar, Dirección de Salud de Moquegua, Policía Ecológica, OEFA, Electrosur, Engie, Sernamp, entre otros. Las cinco jornadas han congregado alrededor de 400 voluntarios.
“Yo amo mi playa limpia”, es una campaña que promueve la empresa minera en Ilo, hace 10 años y tiene como objetivo generar un cambio en la mentalidad de los veraneantes y buscar un efecto multiplicador en la comunidad. Se prevé que concluirá la primera semana de marzo cerrando la temporada de playas de 2023.