El millonario Warren Buffett, el “oráculo de Omaha”, ha decidido apostar contra la economía y refugiarse en el oro. Buffett no hace esto siguiendo una corazonada sino luego de un análisis detallado del contexto actual. El multimillonario sorprende al mercado con el movimiento de su cartera, y los mercados prestan atención dado que décadas antes apostó y ganó.

El movimiento se produce en un momento en el que los precios del oro alcanzaron nuevos máximos históricos este año. El metal superó brevemente los US$ 2,000 recientemente antes de retroceder un poco.

Berkshire Hathaway, propiedad de Warren Buffett, hizo su primera inversión en una minera productora de oro y con operaciones en Argentina, una descripción que calza con Barrick. El grupo compró 20,9 millones de acciones de Barrick Gold, por un valor de unos US$ 564 millones, según diversos medios como Bloomberg y Financial Times.

En el pasado, Buffett advirtió que la inversión en el metal no es productiva pero ahora los mineros de oro se están beneficiando del aumento de los precios de los lingotes que están impulsando los márgenes de ganancia a medida que los costos de producción se han estabilizado.

Las acciones de Barrick subieron hoy lunes más del 10% al conocerse que el tiburón de las finanzas le ha agarrado cierto gusto al metal precioso, cuando antes, en diversos discursos y entrevistas, dejaba sentada su opinión de estar en contra de este tipo de inversiones.