
¿Qué ha hecho la multinacional finlandesa tras la aparición de la pandemia? Este artículo aparece en nuestra edición digital «Metso Outotec Perú, después del covid-19».
El COVID-19 lo ha trastocado todo en las mineras, y también en sus más grandes proveedores. La multinacional finlandesa ha tenido que adecuar su plan de vigilancia, prevención y control de la pandemia en el trabajo en todos los aspectos, desde los protocolos para «el regreso y reincorporación al trabajo» y otras tantas medidas para evitar los contagios. Como es de suponer, el plan ha sido elaborado tomando en cuenta los requisitos legales solicitados por los ministerios de Energía y Minas, Producción y Salud, a la par que ha sido revisado y aprobado por instancias internas de la propia Metso Outotec.
La empresa ha incorporado los protocolos COVID-19 en todos sus servicios garantizando la salud de sus trabajadores dentro y fuera del área de trabajo, además está personalizando e innovando sus servicios en medio de la desafiante coyuntura actual permitiéndole cubrir una amplia gama de servicios en campo desde los que exigen un elevado nivel de especialización así como también de los servicios misceláneos y de esta forma continuar brindando servicios en las paradas de planta, servicios de asesoramiento en etapas de pre comisionado y comisionado de equipos de procesos, servicios de cambios de revestimiento en molinos SAG y molinos bolas, servicios de planificación de mantenimiento, servicios de ejecución y desarrollo de backlog en el mantenimiento correctivo bajo el concepto guardias de trabajo que garanticen el mayor tiempo de permanencia de trabajadores en mina cumpliendo los protocolos de aislamiento, control y salud, entre otros.
Debido a la pandemia, se ajustaron algunas tuercas pues todas las operaciones mineras están modificando la configuración de sus paradas de planta. Alex Salvador, gerente de Servicios de Metso Outotec, reveló que «los planes de mantenimiento concebidos con gran volumen de personal han migrado ahora a un volumen mucho menor y con mayor énfasis en la especialización técnica y en la menor exposición a posibles contagios» y admite que ahora «el reto es grande considerando que significa reformular una estrategia de mantenimiento que lleva muchos años implementada».

El COVID-19 ha gatillado la adopción de nueva tecnología en Metso Outotec e impulsado con mayor énfasis el soporte remoto por parte de sus especialistas, contó Alex Salvador, «lo que implica el uso de herramientas de monitoreo y control a distancia como lentes smart glass con transmisión remota de data y sistemas de monitoreo por inteligencia artificial Metso Metrics».
Alex Salvador refiere que en un contexto como el actual los protocolos son revisados minuciosamente tanto por Metso Outotec como por sus clientes para demarcar responsabilidades: «Una nueva herramienta que la organización viene incorporando es la realización de talleres de riesgos a fin de poder revisar formalmente los protocolos junto con el cliente y establecer responsabilidades bilaterales que permitan éxito en la aplicación de protocolos en terreno». Con respecto a uno de los proyectos más emblemáticos de la minería peruana en los últimos tiempos, en los que participa Metso Outotec Salvador reveló que están en «constante comunicación con nuestro cliente Anglo American Quellaveco a fin de conocer las fechas de reinicio de la construcción del proyecto» y que sus «ingenieros especialistas respaldarán la instalación de los dos molinos SAG 40’x24’ y dos molinos de bolas 28’x44.5’ que se encuentran a disposición para reiniciar actividades en agosto o antes».
Nuevos controles para nuevos tiempos
Bajo el contexto actual del Covid-19, las jornadas largas es el nuevo modo de trabajar en las operaciones, todas las compañías mineras están implementando guardias largas de 30×30, 20×15, y así, especificó Jorge Locatelli, jefe de Salud Ocupacional de Metso Outotec, y han incorporado protocolos muy exigentes de «días de cuarentenas con el objetivo de asegurar la salud de sus colaboradores antes de subir a mina, y durante y después de culminar el trabajo en sus operaciones». Lo que ahora busca la industria en general es reducir el número de traslados desde las ciudades hasta los sites. Esta medida inevitablemente incrementa la permanencia de todos los colaboradores que participan en la operación y mantenimiento de sus plantas, al mismo tiempo que reduce el riesgo de exposición al COVID-19, que es por ahora una de las prioridades del sector.

La legislación siempre está un escalón detrás de la tecnología y eventos pandémicos como, en este caso, se está dando por el virus. De modo que si bien las normas ya se han comunicado, desde el punto de vista de los especialistas en salud y seguridad, vendría bien definiciones más exactas. «Siempre hay oportunidades de mejora, y creemos que se pueden adicionar conceptos importantes como la definición de contacto, estableciendo distancia, tiempo e incluyendo las situaciones donde se use EPP y donde no se use EPP», piensa Jorge Locatelli. Y añade: «El conocimiento del virus ha evolucionado en las últimas semanas y un aspecto muy importante que incluso ya han definido algunos países es tener protocolizado los criterios de alta médica y su aplicación para la reinserción laboral; este punto es vital para brindar confianza y tranquilidad sobre el manejo de los portadores sintomáticos y asintomáticos, y cuando estos deben ser dados de alta además de establecer el tiempo y condiciones para que se reincorporen al trabajo».
Salud y deporte
En Metso Outotec han incorporado una serie de medidas de control de riesgo tanto individual y colectiva que incluye el uso de nuevas tecnologías como cámaras termográficas para el control de temperatura corporal, tanto fijas como móviles, uso de aplicativos en teléfonos móviles para toma de cuestionarios, encuestas, reportes, con alertas en tiempo real, para reducir el contacto personal, cámaras de supervisión de distanciamiento social y hasta sistemas de protección respiratorio individual con aire asistido para operaciones en campo.
El plan de la firma es global y se aplica tanto en operaciones mineras como en sus oficinas en Lima. «Somos muy responsables en ese sentido y tenemos un plan de reactivación gradual en nuestras oficinas de Lima, conforme se garantice un control sostenido de la enfermedad en el país, incluso más allá de que se hayan cumplido los plazos de aislamiento y tengamos las autorizaciones para el retorno», declaró Joel Herrera, gerente de Salud, Seguridad, Ambiente y Calidad de la empresa.
La compañía una proveedora de clase mundial, ha identificado «al personal que puede realizar trabajo remoto», que en gran medida lo constituyen el grupo de trabajadores que presenten algún tipo de riesgo asociado al COVID-19. «Por otro lado, hemos establecido criterios claros para definir qué personal continuará bajo la modalidad de trabajo remoto hasta que determinemos la fecha en que puedan retornar a oficinas», indicó Herrera.
Actualmente ha reiniciado operaciones del Metso Outotec Service Center, que es el centro de reparaciones de Río Seco en Arequipa, y también de la Metso Outotec Rubber Plant, que es la fábrica de revestimientos y productos de caucho en Vulcano en Lima. A estas actividades también se les ha unido el despacho de mercaderías así como la reactivación de los servicios especializados en campo, fortalecido con la asistencia técnica online y el monitoreo remoto para sus clientes mineros, en tanto que su personal administrativo continuará realizando trabajo de oficina en casa. La empresa también ha incluido en su política asociada al trabajo remoto un programa de entrenamiento físico y distensión con una frecuencia de tres veces por semana y un plan de apoyo psicológico.
Autor: Energiminas (info@prensagrupo.com)