
El proyecto minero ha reiniciado, sus costos han aumentado pero su inicio de producción se mantiene para 2020. Este artículo en la edición 80 de la revista que puedes consultar aquí.
Tras el parón por la pandemia, Anglo American ha retomado los trabajos en Quellaveco, su proyecto de cobre en Moquegua y cuyos costos de construcción han aumentado inexorablemente: mantener a raya el coronavirus, cuando los trabajadores se cuentan no por decenas sino por miles, cuesta un dineral. Si antes la inversión máxima de Quellaveco estaba por los US$5.300 millones, hoy los ejecutivos de la minera global con sede en Londres han subido la valla hasta los US$5.500 millones, aunque el proyecto, según Mark Cutifani, su CEO, si es que no hay otro período de cuarentena, cumplirá con el ambicioso cronograma de iniciar producción en 2022.
Ahora bien, ¿en qué trabajos de construcción se enfocará la empresa para la segunda mitad del año? Mark Cutifani, en una presentación frente a inversionistas a finales de julio, fue muy diáfano en afirmar que las obras de construcción en Quellaveco serán diversas y por supuesto vitales. Las actividades clave del proyecto en los segundos seis meses serán la construcción de una tubería de agua de aproximadamente 95 kilómetros desde el área de la fuente de agua hasta la operación Quellaveco, el inicio de las actividades de extracción previa para eliminar el material de desecho superficial y la instalación y ensamblaje de los molinos, de la marca Metso Outotec.

Antes de la irrupción del covid-19, decenas de trabajadores -mecánicos, electricistas, andamieros, riggers y operadores de grúa- concretaron un gran avance en la construcción del megaproyecto de cobre Quellaveco: el ensamblaje y montaje de la monumental grúa puente necesaria para avanzar con la construcción de la planta concentradora Papujune.
El ensamble avanzaba conforme a lo programado, y se esperaba que los trabajos restantes culminaran en la tercera semana de marzo. Pero el aumento de los casos de coronavirus interrumpieron las labores.
Para hacer factible la instalación de los dos molinos de bolas y los dos SAG, se concluyó con el montaje de 2.300 toneladas de estructuras metálicas asociadas al área del edificio de molienda. donde se instalarán los molinos, luego de la instalación de los puentes grúa. La instalación de los molinos debió ejecutarse en abril, pero ahora el cronograma de Anglo American sitúa esta tarea en la segunda mitad de 2022.
Los molinos de bolas cuentan con un diámetro de 8.5 metros y 13.4 metros de largo y los molinos SAG tendrán 12 metros de diámetro y 7.3 metros de largo. Los molinos que utilizará Quellaveco son los mismos que se han montado en la planta concentradora del gigante proyecto Cobre Panamá, de First Quantum. Estos equipos serán gearless, sin engranajes de accionamiento. Una de las grandes ventajas de estos equipos es que su tecnología de rotación se basa en el electromagnetismo, simplificando el número de componentes de transmisión.
“Los muchachos han estado haciendo un trabajo fantástico. Cuando se impuso la cuarentena nacional, la mayoría de la fuerza laboral de 10.000 personas del proyecto se desmovilizó de acuerdo con la solicitud del gobierno”, dijo Mark Cutifani, en la reciente reunión con los inversionistas. “El trabajo de construcción como consecuencia se redujo significativamente. Y aunque mantenemos algo de trabajo en artículos críticos, fuimos detenidos sustancialmente en todos los ámbitos”.
Anglo American decidió extender la suspensión por tres meses de las obras en Quellaveco, luego de las medidas adoptadas por el Gobierno peruano para mitigar los contagios por covid-19, en marzo. “Ahora estamos en un reinicio por etapas”, especificó el CEO. Hemos estimado el costo de la desmovilización y la removilización, y el costo de los cambios estructurales que hemos realizado en toda la organización”. Debido a la pandemia, Anglo American busca reducir el pico de la fuerza laboral en el proyecto y avanzar con precaución.
Quellaveco es un proyecto minero asentado en la región de Moquegua que construyen en sociedad Anglo American y Mitsubishi. El gasto de capital para Quellaveco es atribuible en un 60% a Anglo American y en un 40% a Mitsubishi. Y con respecto a la tubería de agua, esta está en manos de la empresa Techint, que inició en febrero la etapa de soldadura de la línea de agua fresca del proyecto minero. El ducto mide más de 88 km y conducirá el agua desde la zona denominada “Alta Montaña” hasta la planta de procesos Papujune.

El 90% de la obra se ejecutará en la zona de Alta Montaña, cuya geografía accidentada y clima adverso representan un gran reto para el personal de Techint. Los trabajos de la línea de agua fresca dan inicio a un nuevo hito, con la soldadura de los tubos que componen la infraestructura del ducto. La tubería es de acero de carbón, y tiene un ancho de entre 24 y 28 pulgadas. La obra se construye de forma lineal. Su instalación contempla varias fases de trabajo, incluyendo la apertura de pista, excavación de la zanja, tendido y curvado de tuberías, soldadura, revestimiento interno y externo, bajada a la zanja y recomposición del derecho de vía.
Actualmente, Anglo American aplica pruebas moleculares a los trabajadores del proyecto Quellaveco. La minera global, junto con Stracon, inició además su primer programa de entrenamiento de operadoras de camiones mineros.
Quellaveco es uno de los yacimientos de cobre más grandes del mundo y está localizado en la región de Moquegua; tiene reservas para 30 años de vida útil pero la empresa está convencida que su potencial es incluso mayor. Utilizará el proceso minero de tajo abierto y flotación para producir concentrados de cobre, así como molibdeno y plata como subproductos. Se espera que Quellaveco produzca en promedio 300.000 toneladas de cobre por año en sus primeros 10 años de operación.
Autor: Energiminas (info@prensagrupo.com)