Perenco: «Más de 500 embarques y nunca hemos tenido un incidente ambiental en río»

Perenco: «Más de 500 embarques y nunca hemos tenido un incidente ambiental en río»

La franco-vietnamita Perenco opera el Lote 67 desde el 2013, actualmente en suspensión por el covid-19 y los problemas en el Oleoducto Norperuano. El Lote 67, en el distrito de Napo, en la provincia de Maynas, región Loreto, está a dos días en bote de la ciudad de Iquitos y en su pico de producción alcanzó los 6.000 barriles diarios. Antes de la irrupción de la pandemia, la producción de Perenco rondaban los 1.000 barriles diarios.

La logística de Perenco es eminentemente fluvial, y según Raúl Zárate Peña, jefe de Medio Ambiente y Relaciones Comunitarias de la empresa, quién participó en el webinar «Fundamentos para un nuevo diálogo intercultural», organizado por Perú Energía, desde que han iniciado operaciones comerciales y hasta la fecha, luego de «más de 500 embarques de crudo, no hemos tenido ningún incidente ambiental en río». «Ese es un buen desempeño», añadió.

El Lote 67 está compuesto por tres bloques: Piraña, en el que se concentran los mayores procesos de explotación de crudo de Perenco, Dorado, un paso intermedio y Paiche, en donde está el embarcadero que desemboca en el río Curaray. Estos tres bloques lo recorre un oleoducto 49 km de longitud construido por la propia empresa; está bajo tierra y en realidad se trata de dos tuberías: la de mayor diámetro es para el crudo, y la otra, para diluyentes.

Los cambiantes precios del petróleo han golpeado las metas de producción de la empresa. En marzo detuvieron la operación por el covid-19, y aunque Perenco ha dejado de generar ingresos, su política de «buen vecino» la ha mantenido activa donando víveres, colaborando con insumos médicos y generando desarrollo. Rául Zárate Peña, además, reveló que Perenco prontamente entregará «un respirador artificial para el Hospital Regional de Loreto».

Su zona de influencia directa es la comunidad de Buenavista, cuyo pueblo está a más de 40 km del Lote 67. En tanto, Perenco tiene vínculos con cuatro comunidades de influencia indirecta, también a más de 40 km de distancia, todas ellas: Flor de Coco, Urbina y Shapajal.

Perenco, en Buenavista ha instalado una antena satelital para recibir internet, lo mismo hizo en Urbina. Sin embargo, su programa social más importante en la zona es el BAP Pastaza, una suerte de hospital fluvial que recorría los ríos de Loreto ofreciendo servicios de salud para las alejadas comunidades de la selva peruana. El programa de Perenco estuvo en pie desde 2009, y luego fue absorbido en su totalidad por el Estado peruano en 2013, que creó las Plataformas Itinerante de Acción social (PIAS).

Más de 100.000 personas fueron atendidas por el BAP Pastaza de Perenco y miles de personas pudieron además contar con cédulas de identificación pues el buque también tenía oficinas del Reniec.

Autor: Jean Pierre Fernandez (jpfernandez@prensagrupo.com)