La reactivación de la actividad minera y los nuevos protocolos de seguridad y sanidad para mantener a raya el coronavirus han obligado a todas las grandes mineras a tomar la inmediata decisión de adecuar y hasta ampliar sus campamentos cuanto antes y al costo que sea.

Cecilia Asalde, gerente comercial de Nexcom, reveló que han cerrado recientemente «contratos de adecuación de almacenes, talleres y campamentos con Marcobre para su proyecto Mina Justa, con Buenaventura para su unidad de Tambomayo, con Pan American Silver para su campamento en su unidad minera Shahuindo, estamos retomando trabajos también en Southern para Toquepala y Minera Chinalco, mientras que mantenemos diversas negociaciones con otras grandes empresas con operaciones en el sur y centro del Perú». La ejecutiva prefirió mantener en reserva las actuales negociaciones y los montos implicados.

La finalidad en todas las operaciones mineras es la misma: respetar el distanciamiento social, reducir al mínimo las posibilidades de contagio en la operación minera y evitar la interrupción de la producción. «Las mineras necesitan adecuar dormitorios y muchas de ellas están duplicando y hasta triplicando la capacidad instalada previa a la pandemia», dijo Asalde a Energiminas.

Nexcom además está participando en la licitación convocada por Petroperú para construir un hospital modular COVID-19 en Talara, en la región Piura. Cecilia Asalde reveló que participan en tándem con una empresa Italiana que proporcionará todo el equipamiento médico como ventiladores y camas, entre otros Equipos necesarios.

Nexcom tiene actualmente en inventario 400 módulos individuales de dormitorio para aislar al personal, además de ofrecer la alternativa de adecuar un campamento ya montado a la nueva normativa: separación de habitaciones e instalación de más servicios higiénicos para campamentos mineros y petroleros.