
La ayuda no llega a tiempo o llega mal en diversas regiones del país. La Contraloría General identificó que la Municipalidad Provincial de Castrovirreyna, en la región Huancavelica, adquirió para la elaboración de canastas básicas familiares productos de primera necesidad sin el registro sanitario, generando que no se dieran las condiciones de inocuidad (higiene) requerida, poniendo en riesgo la salud de las poblaciones beneficiarias.
De la revisión aleatoria realizada el 22 de abril de este año a algunas bolsas de arroz superior de tres kilos, como se plasma en el Informe de Reporte de Avance N° 001-2020-OCI/MPC-SCC, los auditores identificaron que el producto no contaba con registro sanitario y se observó la presencia de gorgojos.
Ante los riesgos advertidos, la entidad suspendió el proceso de adquisición de los productos y viene incumpliendo el cronograma de distribución de las canastas básicas, generando retraso en la entrega que afecta la finalidad pública de la entrega de alimentos de forma oportuna a la población vulnerable.
En este municipio se dispuso la entrega aproximada de 625 canastas de víveres para igual número de familias, con una inversión ascendente a S/ 50.000.
La entidad además identificó que el padrón de beneficiarios de las canastas básicas familiares del distrito de Castrovirreyna no reúne las condiciones necesarias porque incluyó a personas (55) que no figuran en la base de datos del Reniec, y en otros casos se omitió registrar el número de DNI de los beneficiarios.
Además, se detectó bolsas de hojuelas de avena sin registro sanitario y se recepcionó productos (arroz y avena) de distinta marca a lo ofertado en la orden de compra, evidenciando que no se realizó los controles de verificación debida.
Ica
En la Municipalidad Distrital de San José de Los Molinos, en la provincia de Ica, indica la Contraloría que las autoridades no culminaron, dentro del plazo establecido, con la entrega total de las canastas básicas familiares a la población vulnerable afectada por el aislamiento social debido a la emergencia sanitaria por Covid-19.
Según el Informe de Reporte de Avance ante Situación Adversa N° 021-1-2020-OCI/0406-SCC, la comisión de control verificó que la entrega de las canastas de víveres culminaba el 18 de abril, de acuerdo al cronograma establecido por la municipalidad. Sin embargo, se evidenció que pese haber transcurrido cinco días después de la fecha indicada, la entidad aún tenía canastas pendientes de entrega.
Durante la visita efectuada el 23 de abril último, los auditores encontraron 74 canastas de víveres guardadas en ambientes de la municipalidad. Esta situación genera el riesgo que no se otorgue oportunamente los alimentos a la población afectada por el aislamiento social obligatorio.
De acuerdo al DU 033-2020, el Estado transfirió S/ 50,000 a este municipio para la adquisición y entrega de 625 canasta de víveres para igual número de familias vulnerables del distrito.
Cajamarca
La Contraloría General identificó deficiencias en el proceso de elaboración y distribución de las canastas de víveres por parte de la Municipalidad Provincial de Cajamarca, como la demora en la entrega de los productos por parte del contratista, que los alimentos no contaban con el valor nutricional requerido o que fueron manipulados sin el cuidado correspondiente, poniendo en riesgo la inocuidad de los productos destinados a poblaciones vulnerables que se encuentran afectadas por el aislamiento social, como consecuencia de la presencia del coronavirus en el país.
Estos hechos fueron advertidos por auditores de la Gerencia Regional de Control Cajamarca. Esta municipalidad provincial recibió una transferencia de S/ 1 millón para la elaboración de 13,333 canastas destinadas a las familias más vulnerables.
El Informe de Orientación de Oficio N° 1107-2020-CG/GRCA-SOO identificó que las características técnicas de los productos entregados por el contratista no correspondían a los ofertados ni a lo requerido por la Municipalidad Provincial de Cajamarca, lo que podía haber generado que los beneficiarios consuman productos que no cuentan con el valor nutricional requerido.
Mediante informe N° 238-2020-GSC-MPC, la entidad municipal alcanzó las especificaciones técnicas de cada uno de los productos: arroz superior, azúcar rubia, conserva de filete de caballa, leche evaporada entera, hojuelas de avena instantánea, aceite vegetal, lentejas y arveja verde, las cuales fueron puestas de conocimiento del proveedor. No obstante, la comisión pudo advertir que según especificaciones la leche debió ser entregada en tarros de 400 gramos, sin embargo, se entregaron 1,818 bolsas familiares conteniendo otro producto lácteo con un peso de 395 gramos.
En lo que respecta a las conservas de filete de caballa, se advirtió que el proveedor entregó una marca cuyos valores nutricionales son distintos a lo solicitado y ofertado. Se entregó un producto que contenía 202,88 kilocalorías, cuando debió tener 295.1 kilocalorías.
Del mismo modo, el informe señala que los productos adquiridos como arroz, azúcar y hojuelas de avena debieron ser envasados, pero fueron entregados a granel (en sacos).
En la primera visita realizada al almacén el 7 de abril, la Contraloría advirtió que los productos alimenticios estuvieron almacenados en el suelo, pese a la humedad existente por las lluvias. Asimismo, se permitió que los sacos de alimentos sean utilizados como lugares de descanso.
Por último, se identificó que el contratista entregó las bolsas de alimentos fuera del plazo exigido por la Municipalidad Provincial de Cajamarca, generando la demora de su distribución a la población beneficiaria debido a la emergencia sanitaria.
Áncash
Las autoridades detectaron riesgos en la calidad y almacenamiento de los productos adquiridos por la Municipalidad Provincial de Huaraz para la elaboración y entrega de canastas básicas familiares a las poblaciones vulnerables afectadas por el aislamiento social decretado como medida preventiva contra el Covid-19, lo que podría afectar la salud de la población beneficiaria.
Según el Informe de Control Concurrente N° 012-2020-OCI/0337-SCC, realizado al proceso de recepción y almacenamiento de los víveres adquiridos para las canastas básicas, la Municipalidad Provincial de Huaraz no ha acreditado la inocuidad de uno de los productos importados, es decir condiciones de salubridad que garanticen su calidad. Es el caso de 5 toneladas de lenteja bebé cuyos sacos no evidencian registro sanitario, fecha de envasado ni de caducidad.
Advertido el hecho por los auditores, la Contraloría coordinó con el proveedor el reemplazo del producto, sin embargo, tras concretarse el cambio las omisiones continuaron, situación que podría generar riesgos en la salud de los beneficiarios.
Otra de las observaciones tiene que ver con el almacenamiento de los productos. Tras la visita realizada al local utilizado como almacén, el 13 de abril, los auditores advirtieron que parte del personal que manipula los alimentos no contaba con los implementos de bioseguridad como guantes de látex, mandilón, gorro y lentes protectores. A ello se suma el que los productos tienen contacto directo con el suelo, afectando su inocuidad.
Asimismo, se evidenció que la entidad no cuenta con un registro de control formal de salida de las canastas básicas para su distribución, lo que pondría en riesgo el adecuado control y seguridad de los productos alimenticios. La Municipalidad Provincial de Huaraz programó la entrega de 2,500 canastas valorizadas en S/ 80 cada una, para ello recibió S/ 200,000 de presupuesto.
Tumbes
La Contraloría General de la República detectó que canastas con productos de primera necesidad que serían entregadas a poblaciones vulnerables se encontraban almacenadas en condiciones no adecuadas en las municipalidades distritales de Papayal y Matapalo.
Los informes de Orientación de Oficio N° 620-2020-CG/GRTB/SOO y N° 619-2020-CG/GRTB/SOO indican que tanto en la Municipalidad Distrital de Papayal como en la Municipalidad Distrital de Matapalo no se cuenta con medidas de seguridad y de restricción de acceso. Además, el responsable del almacén no cuenta con kardex u otro documento o sistema que permita llevar el control del ingreso y salida de los bienes.
También en la Municipalidad Distrital de Matapalo se identificó que en el local comunal que sirve de almacén los alimentos se encontraban sobre el piso, en condiciones higiénicas inadecuadas; mientras que en el municipio de Papayal se detectó que los productos habían sido ubicados cerca a los servicios higiénicos.
Los informes también observan que las municipalidades no han informado oportunamente y por medios eficaces el cronograma de entrega de los productos de primera necesidad a la población beneficiaria.
Además, la entidad detectó que la Municipalidad Provincial de Tumbes no ha elaborado un padrón de beneficiarios previo a la entrega de canastas de productos de primera necesidad, en el marco de la emergencia nacional por el Covid-19.
Según el Informe de Orientación de Oficio N° 612-2020-CG/GRTB-SOO, auditores de la Gerencia Regional de Control de Tumbes realizaron una visita de control al almacén del municipio de Tumbes, ubicado en el centro poblado de San Isidro, donde se verificó que, previo a la entrega de las canastas, no se elaboró un padrón de beneficiarios.
Ante esto, el titular de la entidad indicó que la estrategia utilizada fue identificar los sectores más vulnerables, a través de las áreas de Defensa Civil, Gerencia de Inclusión Social y Gerencia de Desarrollo Social, y realizar la entrega de canastas en estas zonas. Es decir, el padrón se elaboraba con la información de las actas de entrega de los beneficiarios que recibían la ayuda.
Estos hechos podrían conllevar a que las canastas con productos de primera necesidad sean distribuidas sin criterios mínimos de selección de la población vulnerable y que los productos sean alcanzados a pobladores que no requieren de dicho subsidio.
Piura
En esta región, se corroboraron deficiencias en el proceso de distribución de las canastas de víveres para las familias vulnerables en el distrito de Catacaos.
Los hechos advertidos se encuentran detallados en el Informe de Hito de Control N° 1055-2020-CG/GRPI-SCC, el mismo que ha sido notificado al titular de la Municipalidad Distrital de Catacaos desde el último 24 de abril, con la finalidad de que adopte las medidas correctivas pertinentes, y de esta manera salvaguardar el buen uso de los recursos públicos.
Según el informe, la comisión constató la inexistencia de un plazo otorgado al proveedor para la entrega de productos de la canasta básica familiar, lo cual genera el riesgo de demora en la atención a la población vulnerable en concordancia con la emergencia sanitaria decretada.
Justamente, los auditores verificaron que al 15 de abril de 2020 el proveedor aún no había entregado la totalidad de víveres: 231 unidades de avena. Esta situación ocasionó el retraso en el reparto de las canastas.
Autor: Jean Pierre Fernandez (jpfernandez@prensagrupo.com)