
Tras haber iniciado operaciones en diciembre de 2019, el proyecto piloto del Lima e-bus, el primer bus eléctrico de transporte urbano en la ciudad de Lima, ha dejado importantes resultados que demuestran los beneficios tangibles de los buses eléctricos, lo que alienta la posibilidad de dar paso a su masificación en el país.
El informe de replicabilidad del Lima e-bus de Enel X Perú, luego de casi 31.000 kilómetros de recorrido y seis meses de operación, concluyó que el impacto de la tecnología al medioambiente ha sido positivo, pues se evitó emisiones de CO2 y redujo la contaminación sonora, así como el costo de mantenimiento.
En la comparación de emisiones de autobuses de 12 metros sobre la base de 6 meses de funcionamiento y 30.944 km de recorrido acumulados), el bus eléctrico de Enel X Perú evitó la emisión de 24 toneladas de CO2 en comparación con un autobús diésel, y 35 toneladas frente a un autobús de GNV.
“El diésel emite 29.8 toneladas de CO2, el GNV 40.7 toneladas de CO2 y el e-Bus 5.6 toneladas de CO2, entre impacto directo e indirecto”, dijo Luis Calzado, director de proyectos de Global Sustainable Electricity Partnership (GSEP). “Demostramos tangiblemente que, en una operación de 6 meses con un recorrido aproximado de 30 mil km, la tecnología eléctrica es con una gran ventaja la que produce menores emisiones de CO2 y metano”.

El estudio comprobó también que el e-bus emite menos ruido frente a los buses diésel. La reducción del ruido se produce tanto al interior como en el exterior del bus: durante la aceleración hay una reducción de ruido de 6 dBA, mientras que los pasajeros pueden experimentar una reducción del ruido interior de hasta 10 dBA.
En relación a los costos de operación, en una comparación preliminar se demostró un ahorro de 28 US$/día en comparación con los buses que utilizan gasóleo, y de 10 US$/día en comparación con los que necesitan del gas natural comprimido (GNC).
A lo largo de un mes, el ahorro de costes de un e-bus puede ascender a unos 840 US$/mes frente al gasóleo o 300 US$/mes frente al GNC. Asimismo, se estima que habrá un ahorro de costos durante la vida útil del e-bus: 30% menos que el diésel y 17% menos que el GNC.
Calzado resaltó que el costo del bus eléctrico viene bajando debido a que también se está reduciendo el costo de las baterías año a año (por una mayor penetración de la movilidad eléctrica en el mundo), lo que hace que “el mismo bus eléctrico baje de precio también”.
Resaltó que los futuros despliegues de Lima e-Bus pueden ser más económicos que los de diésel y GNV debido al precio de compra más bajo de e-Bus, a la familiaridad con el mantenimiento y a la estructura tarifaria de la electricidad a gran escala.
Alex Ascón, especialista en e-Mobility de Enel X, indicó que lo que se necesita para hacer realidad la masificación de los buses eléctricos en el país es una articulación perfecta entre “la autoridad de transporte urbano y el modelo que nosotros planteamos”.

Explicó que este modelo obedece a contratos de más tiempo (15 años) y a garantías por parte del Gobierno por los niveles de financiamiento, y además a cómo está estructurado el sistema de transporte.
“La tecnología no es solo cambiar un bus a combustión por uno eléctrico, sino que va más allá. Primero es reordenar el sistema de transporte -que lo viene haciendo la autoridad de transporte-; luego, es elaborar este modelo de negocio en la cual articulas al Gobierno, dando las garantías para el financiamiento de estas grandes inversiones a largo plazo a los operadores”, precisó.
En 2017 se realizó un estudio de prefactibilidad sobre la premisa de un proyecto piloto para introducir autobuses eléctricos (e-buses) en las operaciones de transporte público en Lima. La GSEP decidió asociarse con Hydro Quebec de Canadá y Enel X para obtener experiencia en infraestructura eléctrica.
La siguiente fase del proyecto piloto será la continuación de las operaciones del Lima e-bus y la recolección de más datos. El objetivo es recopilar información para todos los meses de un año natural para estudiar los impactos de la estacionalidad y normalizar estos datos para los impactos de COVID-19 en el número de pasajeros. Esta fase ampliada de seguimiento del piloto permitirá seguir estudiando el rendimiento operativo del e-bus.
Lima e-bus es una de las iniciativas de Enel X Perú que se suman a los esfuerzos de Enel para contribuir a la transición energética.
Autor: Energiminas (info@prensagrupo.com)