La empresa Gold Fields Limited no quiere convertirse en un ínfame ejemplo de una pésima y lamentable gestión de relaveras que desemboquen en la muerte de cientos de personas, tal como sucedió con la empresa Vale, en Brumadinho-Brasil, cuya irresponsabilidad causó 300 fallecidos.
Por tal motivo, expresó, muy decididamente, que está contribyendo a la labor actual del Consejo Internacional de Minería y Metales (ICMM) y las Naciones Unidas para desarrollar una norma internacional que regule la gestión de relaves.
Este estándar mundial se basará en las mejores prácticas para garantizar que los riesgos de las instalaciones de relaves se gestionen de manera adecuada, coherente y transporte.
Precisó que de las 32 instalaciones de relaves que administra, 12 se encuentran activas y una se someterá a pruebas de comisionamiento. Otras dos relaveras son administradas en asociación con otras empresas.
«Gold Fields mantiene medidas para administrar la seguridad de sus instalaciones de relaves, incluido el cumplimiento de la Declaración de Posición de Gobernanza de Relaves del ICMM», señaló.
La empresa mencionó que está alineada a las Declaraciones de Posición de la ICMM sobre el agua y la gestión de relaves, tal como se corrobó luego de realizarse revisiones internas y externas sobre la gestión relaves y agua entre los años 2017 y 2018.
Expresó que todas sus instalaciones de almacenamiento de relaves, así como la infraestructura asociada a las tuberías y bombeo, están sujetas a una auditoría independiente cada tres años, o con mayor frecuencia cuando así lo exijan las circunstancias o regulaciones locales.
«Para mejorar aún más la seguridad operacional de nuestras relaveras, Gold Fields está evaluando el potencial para alejarse de la construcción de instalaciones aguas arriba o aguas abajo, considerando los relaves apilados filtrados y secos, así como los relaves dispuestos en el tajo», indicó.
