
La francesa ENGIE, la mayor generadora eléctrica del país, ha desarrollado a nivel global una estrategia que busca impulsar el ingreso masivo de los vehículos eléctricos para el transporte de pasajeros y el uso privado.
Así, en Chile, a través de su subsidiaria ENGIE Factory, ha dado pasos importantes en ese objetivo con la instalación del primer punto de carga (electroliniera) público, en la comuna Las Condes, en Santiago. Pero Daniel Cámac, Deputy Country Manager de la francesa, adelantó que serán 100 las electrolineras que serán colocadas en puntos estratégicos de la capital chilena.
Ahora ENGIE afina la estrategia para dar el mismo impulso en el Perú, donde busca repetir el mismo esquema. Una de las primeras trabas que ha encontrado es la inexistencia de una normativa que contemple el uso de los vehículos enchufables y esa es una tarea pendiente que corresponde al Gobierno.
Aun así, ENGIE, en trabajo conjunto con el fabricante de autos chino BYD, han importado el primer bus eléctrico y algunos modelos de autos enchufables. Pero Daniel Camác ha adelantado que eventualmente llegarán más buses, acorde al incremento de la demanda, y que en setiembre deben iniciarse las pruebas de estas unidades en Lima.
En esa misma sintonía va el Ministerio de Energía y Minas (Minem) que en marzo pasado anunció que se está evaluando crear un subsidio para quienes deseen comprar un coche eléctrico. El ahora viceministro de Electricidad, Raúl García Carpio, señaló que se está trabajando en un marco regulatorio que promueva el uso de esa tecnología en el país. Un reflejo de ese interés se apreció cuando el Ministerio de Economía optó por exonerar a los autos eléctricos e híbridos (a combustibles y electricidad) del Impuesto Selectivo al Consumo.
Pero en la elaboración de la normatividad necesario el Ministerio de Transportes juega un rol igual o más importante que el Minem y aún no ha emitido mensajes ni acciones claras respecto a la movilidad eléctrica.
En el reciente PERÚ ENERGÍA, realizado en junio pasado, el titular del Ministerio de Energía y Minas, Francisco Ísmodes, pudo constatar la transformación tecnológica que traerán los autos eléctricos en el stand de ENGIE, donde se exhibió un coche enchufable.
Los autos eléctricos no emiten emisiones contaminantes y ofrecen una autonomía que fácilmente supera los 100 kilómetros , dependiendo del modelo, y su tiempo de carga no es mayor a las ocho horas si la batería llega a agotarse. Pero esta industria tecnológica tiene una acelerada dinámica con fabricantes esmerados en abarcar todos los tipos de vehículos (como los camiones) y a ofrecer una autonomía superior con menores tiempos de carga.
Autor: webmaster (mvegaplm@gmail.com)