Kate Harrisson, embajadora del Reino Unido en Perú, en su participación en el Jueves Minero Virtual organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), tiene una idea muy clara del potencial de la minería peruana. Según ella, el futuro será verde, eléctrico y nadie puede detener esa tendencia y Perú, si se lo propone, puede ser un líder en este proceso.

“La minería es la base para la revolución sostenible que se avecina con el cobre y el litio, y el Perú tiene el potencial y los recursos para ser líder en este proceso”, dijo la embajadora. “La minería formal puede ser un gran motor de desarrollo, a nivel mundial se está convirtiendo en una industria limpia”. Perú es el segundo productor mundial de cobre y un potencial productor de litio con un proyecto recientemente descubierto en Puno, sobre el cuál aún se elaboran estudios.

Sostiene que, en efecto, la minería es la industria clave del PBI peruano pues fomenta las exportaciones y genera empleo de calidad, que a su vez gatilla el consumo interno y tiene un efecto multiplicador para el desarrollo de otros rubros, pero su gran aporte al mundo es la transición energética. La minería, refirió, es el pilar de la tecnología verde y ecoamigable. “Sin los recursos de la minería, esto no sería posible, la minería es el motor del desarrollo económico”, refirió.

Ahora bien, subrayó que los países no pueden aceptar prácticas como la minería ilegal o la contaminación. “Estas prácticas deben ser detenidas”, dijo. En el Perú, la minera global Anglo American invierte US$5,300 millones en la construcción de su futura mina de cobre Quellaveco.

Más del 10% del PBI peruano es cubierto por la actividad minera, que genera alrededor del 60% de las exportaciones. Su portafolio de proyectos mineros supera los US$56 millones y es esencialmente de cobre.