
Jean-Paul Luksic es el presidente de un imperio económico llamado Antofagasta plc. Y en su reciente carta a los accionistas del grupo puso los reflectores sobre la relación entre los sindicatos y la compañía. En realidad, Luksic recordó que Antofagasta Minerals (AMSA), el brazo minero del holding, nunca ha enfrentado una huelga desde que comenzaron sus operaciones en 1980.
“Disfrutamos de buenas relaciones con nuestros empleados y contratistas. Esto se ve confirmado por los grandes avances que hemos logrado al trabajar con los sindicatos -en Centinela y Zaldívar en 2017- para llegar a un acuerdo sobre compensación y condiciones de trabajo para los próximos tres años”, se lee en la misiva contenida en la memoria de la compañía.
En Chile en particular y en el mundo en general, sostuvo el empresario, “el conflicto en las negociaciones se ha vuelto más común”. Hace algunas semanas, reseña El Mercurio, el grupo cerró un acuerdo con el mayor sindicato de Los Pelambes, su principal activo, que incluyó el pago de 18,5 millones de pesos (alrededor de US$31,000) chilenos por trabajador entre bonos y crédito blando.
Electromovilidad
Luksic es otro convencido de que la era de la electromovilidad será beneficiosa para la industria del cobre, pero sostuvo que su efecto tardará en hacerse sentir: “Creemos que a corto plazo el mercado del cobre está en equilibrio, con una perspectiva a largo plazo ampliamente positiva”.
Antofagasta plc, dijo, está enfocada en optimizar sus operaciones existentes. “Buscamos un crecimiento sostenible y orgánico en las áreas que rodean nuestras operaciones. Y finalmente, buscamos oportunidades especiales en las Américas, para crecer más allá de nuestro negocio principal en Chile”, sostuvo.
Autor: Jean Pierre Fernandez (jpfernandez@prensagrupo.com)