
Hay un virus -Covid-19- causando estragos sanitarios en el mundo y hay dos líderes, Vladimir Putin (presidente de Rusia) y Mohamend bin Salman (príncipe heredero de Arabia Saudita) haciendo descalabros en el mercado del petróleo. Ninguno de ellos ha dado su brazo a torcer y la consecuencia es cuantificable y conocida: el desplome a mínimos de casi dos décadas. Han iniciado una guerra suicida en la que ambos pierden y con ellos también la economía mundial.
El precio de barril de Brent, el petróleo de referencia en Europa, se hunde este miércoles casi un 14%, hasta caer por debajo de los US$24 por barril, su nivel más bajo desde 2003. El precio del WTI, en Texas, es aún menor.
El encontronazo de orgullos y negocio de Arabia Saudí y Rusia y su ruptura ha llevado al tacho los acuerdos de reducción de la oferta entre la OPEP y el país de los osos. Según Bloomberg, esta es la guerra de precios más brutal desde que se tienen registros. Con US$20 el barril el grueso de las petroleras operan en pérdida y es insostenible.
La caída del crudo ha obligado a Venezuela a pedir ayuda al FMI, y este ha dicho que no; Pemex (México) ajusta sus fórmulas para no ahogarse en el temporal, lo mismo que Ecopetrol en Colombia y las industrias en Ecuador. .Arabia Saudita, líder de facto de la OPEP, que comenzó una pugna con Rusia, tiene previsto seguir bombeando a una tasa récord de 12.3 millones de barriles por día durante meses.
Lo que sucede tiene una explicación desde el punto de vista imperial. Estados Unidos es actualmente el mayor productor de crudo del mundo, y es así porque utiliza la tecnología del fraccionamiento de rocas. Rusia quiere acabar con este modelo de negocio y que el commodity baje a precios con los que solo puedan competir y sostener grandes industrias. Arabia Saudí, en cambio, está cómoda con un petróleo caro para tener en superávit sus cuentas públicas.
Los dos países dependen de sus hidrocarburos para sobrevivir. El 30% del PIB y el 40% de las exportaciones de Rusia proceden de esos productos. El caso saudí, el porcentaje es del 50% y el 70%, respectivamente.
Autor: Jean Pierre Fernandez (jpfernandez@prensagrupo.com)