Cuando el sueño provoca accidentes (a propósito del choque de camiones en la mina Lagunas Norte)

Cuando el sueño provoca accidentes (a propósito del choque de camiones en la mina Lagunas Norte)

Lo más probable es que el accidente en Lagunas Norte, de la minera Barrick, una de las más grandes productoras de oro del mundo, haya sido provocado por un error humano. El conductor ha resultado herido y la minera sostiene que investigará el hecho, acontecido el miércoles 1 de agosto, en noche cerrada, en el distrito de Quiruvilca, provincia de Santiago de Chuco, región La Libertad, en la zona norte de los andes peruanos, a una altura entre los 3.700 y 4.200 metros sobre el nivel del mar. (Para ver la nota ir a https://www.energiminas.com/accidente-entre-dos-camiones-mineros-habria-acontecido-en-lagunas-norte-de-barrick/)

Los camiones mineros que utiliza la operación Lagunas Norte, de Barrick, son todos de la marca Komatsu y todos estos cuentan con Komtrax, el sistema de monitoreo satelital del equipo que mediante tecnología inalámbrica, basada en internet, provee a los usuarios información crítica en cualquier momento y lugar. La información que recolecta el sistema permite a los usuarios tener un control mayor de sus operaciones, prolongando la vida útil de los componentes de la máquina, reduciendo la probabilidad de fallas catastróficas y eliminando la mayoría de los tiempos muertos imprevistos. Con Komtrax, se conoce la ubicación en tiempo real del equipo, las horas trabajadas, la cantidad de combustible consumido, la temperatura del refrigerante, si se encuentra operando o en reposo, posibles trabas del motor y hasta detalles como la presión hidráulica. El sistema Komtrax es como nuestro mejor amigo: conoce todos nuestros secretos.

El DSS  mide el cierre de los parpados. En nuestro país, el DSS ha salvado vidas en la operación Toromocho  y actualmente Antamina trabaja en su implantación, aunque a esta se opone el sindicato de la minera. ¿La razón? La tecnología, dicen, invade su privacidad. 

¿Cómo funciona el sistema? El Komtrax usa la red de satélites de la órbita baja para obtener información crítica de la máquina y transmitirla hacia su computadora y la del distribuidor local. Colecciona información detallada de su máquina en forma diaria a través de envíos de eventos. Todos los días, los expertos de Komatsu envían reportes de desempeño a la operación.La data de Komtrax puede también ser descargada directamente en hojas de cálculo para mayor análisis. Por lo tanto, la investigación sobre el accidente acontecido en Lagunas Norte que iniciará Barrick, luego de descartar cualquier falla mecánica, y dada las circunstancias de este (de noche), lo más probable es que haya sido responsabilidad del conductor.

Para evitar el error humano por fatiga, por falta de sueño, existen sistemas que supervisan hasta la frecuencia de parpadeos de los operadores. La conducción nocturna de camiones pesados, sin horas de sueño adecuadas y en turnos desgastantes, cansan a cualquiera. Caterpillar ha implantado esta tecnología en más de 5,000 equipos en EEUU, Australia y otros países. El sistema es conocido como DSS, un dispositivo de advertencia basado en un software completamente automático de nivel de alerta y fatiga de conductor. El sistema utiliza un sensor miniatura montado en el panel del equipo.

El DSS “ve” el rostro del conductor y mide el cierre de los parpados y la orientación de la cabeza. La información de cierre de parpados es procesada para determinar el nivel de fatiga del conductor. Al monitorear el movimiento de la cabeza, el DSS es capaz de detectar la distracción del conductor. Este sistema, por ejemplo, está presente en los camiones de la operación Chuquicamata, en Chile. En nuestro país, el DSS ha salvado vidas en la operación Toromocho de Chinalco, y actualmente Antamina trabaja en su implantación, aunque a esta se opone el sindicato de la minera. ¿La razón? Aducen los mineros que esta tecnología invade su privacidad. Ahora hay una discusión en la Sunafil sobre si esta innovación vulnera derechos de los trabajadores o no.

No es la primera vez que dos camiones mineros se estrellan en Lagunas Norte. Investigaciones anteriores de accidentes similares han llegado a la conclusión de que la falta de sueño, la fatiga acumulada por no descansar ha desencadenado el accidente. Un accidente muy caro, por cierto. Para darnos un precio de un camión minero basta con conocer el precio de los neumáticos: por encima de los US$40,000 cada uno. A diferencia de en una ciudad, en las operaciones mineras los operadores de camiones mineros deben respetar un límite de velocidad, que suele estar entre los 15 km/h y los 30km/h, además de la distancia entre camión y camión. La versión que mejor encaja es la del pestañeo.

Para el común de las personas, el sueño es un misterio. Para la ciencia, no. Actualmente pasamos más de un tercio de nuestras vidas durmiendo (según  Eduard Estivill, uno de los especialistas en el sueño más famosos de Europa, desde la aparición de la luz eléctrica, la humanidad ha perdido una hora de sueño cada noche).

Todas las lesiones sufridas durante el día se reparan durante la noche; la actividad hormonal aumenta: los niños crecen más durante la noche, también el cabello y las uñas. Se sabe incluso que el sistema inmunitario es mucho más fuerte durante la noche, por eso los portadores de VIH que duermen bien viven más que los que duermen mal o poco. Dormir bien también nos hace mejores estudiantes. Los alumnos que duermen un par de horas antes de un examen obtienen mejores resultados que aquellos que no lo hacen y no porque sean más inteligente sino porque durante el sueño los duendecitos de la  memoria atrapan más datos que durante la vigilia. Al que trasnocha le va peor. A nivel químico, los que duermen bien presentan más melatonina en su organismo que los que pasan des nuits blanches. Lo mismo, se infiere, se podría suponer de los operadores de camiones mineros.

El problema de la calidad de sueño es universal. En el 2005, un equipo de investigadores de la Universidad de Atenas, en Grecia, hizo una encuesta a más de 35 mil adultos, de 10 países, para averiguar sus hábitos al dormir y el nivel de su calidad de sueño. La investigación se llama HOW DO INDIVIDUALS SLEEP AROUND THE WORLD? Se encontró que el 12,4% de la población de Japón sufre de somnolencia diurna intensa severa, 6,2% en China, 14,3% en Brasil, 24,5% en Sudáfrica, 13,7% en Eslovenia, 7,2% en Alemania, 18,3% en Portugal, 12,7% en España, 17,5% en Bélgica y 9,2% en Austria.  Si usted se queda dormido frente a la tele mientras la observa, frente al diario mientras lo lee o frente al semáforo mientras espera el cambio de luz, entonces la padece.

Otro trastorno común durante el sueño son las apneas. Sabemos que está aconteciendo una cuando nuestra respiración se detiene por 10 o 20 segundos mientras dormimos, y nos desesperamos. Los que la han sufrido alguna vez la describen como una experiencia cercana a la muerte. “Cuando sucede durante el sueño, el cerebro reclama y despierta al individuo, obligándolo a respirar de modo acentuado”, explicó Jiménez. “Las apneas aumentan con la edad”. La apnea del sueño puede que sea incluso más peligrosa. Científicos de la Escuela de Medicina y Salud Pública de Wisconsin encontraron un vínculo entre las apneas del sueño y el cáncer. Sucede que los bajos niveles de oxígeno en la sangre pueden desencadenar el crecimiento de tumores. Estudios pasados ya han mostrado que el fenómeno de apnea durante el sueño puede incrementar el riesgo de eventos cardiovasculares, diabetes y trastornos de salud mental, como depresión. ¿Merece la empresa saber todo eso de la persona que contrata?

La apnea del sueño se agrava en la altura. Yvonne Nussbaumer-Ochsner y su equipo del hospital universitario de Zurich descubrieron que existe una relación directa entre el recrudecimiento de la apnea y la altura. Escogieron dos ciudades suizas. Estudiaron primero las cantidades de apneas y otras variables de individuos en Zurich, a 490 m.s.n.m. Luego trasladaron a esos mismos tipos a Davos, a más de 2500 m.s.n.m., e hicieron los mismos exámenes. No solo descubrieron que la frecuencia de las paralizaciones de la respiración durante el sueño aumentaron; también que la saturación de oxígeno bajó, que el ritmo cardiaco se incrementó, que la cantidad de tiempo en la fase cuatro del sueño, la fase más reparadora, disminuyó y que la reacción de un conductor al volante se retardó hasta 10 segundos cuando antes tres, como mucho, eran suficientes.

En el Perú, uno de los que más ha investigado el tema es Jorge Rey Castro, graduado en Medicina en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Rey Castro es uno de los dos especialistas con acreditación en estudios de trastornos del sueño que existen en el país. Según Rey, el 70% de los que están en actividad en la minería en Perú provienen de la costa. Muchos de ellos, al ser expuestos a la altura, presentan cuadros de apnea centrales que no los dejan dormir. “Este fenómeno sucede sobre todo durante los primeros días”, indicó en alguna oportunidad a esta revista. “En la cuarta y quinta noche esta tendencia tiende a bajar. Sin embargo, este problema se repite, en la mayoría de los trabajadores que viven al nivel del mar, cada vez que vuelven a subir porque no son nativos de la altura”.

El problema de las apneas durante el sueño es muy serio. Durante un cuadro de apnea, la garganta se cierra, impidiendo el paso del oxígeno a los pulmones. Hasta el 2000 se pensaba que las apneas no eran mortales.

Así y todo, la apnea tarda en matarnos pero no la somnolencia. En el 2008, contó Daniel Jiménez de Medicina de Altura, se dio a conocer un estudio en el que se analizó 1358 incidentes vehiculares en cuatro minas de tres países distintos por sobre los 3000 m.s.n.m.Se descubrió que el 70% de los siniestros fueron causados no por fallas mecánicas o incapacidad del conductor sino por somnolencia. Los accidentes fueron más frecuentes durante la noche que durante el día, por cierto.

Rey Castro explica que el sueño se divide en estados REM y no REM, es decir, entre sueño superficial y profundo. Los dos forman un ciclo de sueño. En promedio, un sueño reparador debe tener entre cuatro y cinco ciclos. Las personas diagnosticadas con apneas del sueño suelen tener entre dos y tres ciclos.

Daniel Jiménez cree que la solución al problema es la oxigenación suplementaria de los dormitorios. Con solo un 1% más de oxígeno en el ambiente, afirma, se “descienden” 300 metros. En el 2002 participó en una investigación que lo satisfizo: SLEEP OXYGEN SATURATION IN CHILEAN MINERS AT INTERMITTENT HYPOXIA. Los exámenes se llevaron a cabo en dos minas, una a 4300 m.s.m.m. y otra a 3800. En la mina a los 3800, por ejemplo, encontraron que el 15.8% de los mineros que vivía a nivel del mar pero que trabajaba a tal altura dormía cinco horas o menos, el 19.3% tardaba más de 30 minutos en dormirse, el 5.3% se despertaba hasta tres veces durante la noche y el 1.8% tenía la percepción de que su sueño había sido todo menos un descanso. Luego, el equipo del médico Jiménez alteró las condiciones. Inyectaron tal cantidad de oxígeno en las habitaciones para engañar al organismo y hacerlo pensar que estaba a 2800 m.s.n.m. y no a 3800 como era en realidad. Los resultados fueron más que claros: la cantidad de personas que solo dormía cinco horas o menos se redujo a 3,5%; también el grupo de los que se quedaban dormidos en más de 30 minutos, hasta disminuir al 5.2%; las que se despertaban en mitad de la noche hasta tres veces no superaron el 2%. Todo mejoró, tanto que incluso hasta la percepción de mala calidad de sueño se hizo polvo pues nadie manifestó tener la percepción de haber dormido mal.

El cuerpo necesita descansar. El cuerpo pide descansar (pero no ruega). Cuando dormimos, el centro de la lógica de nuestra computadora interna se apaga, y se apaga por una razón evolutiva: necesitará mantenernos alertas y muy razonables durante el día.

Autor: Jean Pierre Fernandez (jpfernandez@prensagrupo.com)