
Desde el domingo 11 de diciembre, un promedio de 5.000 mineros artesanales que llegaron al distrito de Chala desde diferentes labores mineras de Caravelí y de Ayacucho, mantienen bloqueado la Carretera Panamericana Sur, lo que ha dejado incomunicados a Lima con el sur del Perú.
Según los pobladores, en la zona no hay Policías, y los manifestantes que en su mayoría son mineros, han causado destrozos en la propiedad privada y también quemaron algunos vehículos. Estos actos han generado el repudio de los habitantes.
Entre los incidentes, el lunes último, al promediar las 8 de la noche, una camioneta del serenazgo de la Municipalidad Distrital Chala (Caravelí) fue apedreada por la turba que no respetó que había una emergencia.
“Estábamos llevando a una gestante que se le rompió la fuente, y nos lanzaron piedras. No les importó que por el parlante le dimos a conocer de la emergencia y, además, estábamos con la circulina y la alarma. Recién cuando la enfermera bajó de la unidad nos dejaron pasar”, contó un sereno a La República.
La camioneta terminó con un vidrio roto, y la piedra del tamaño de una cebolla, quedó en el interior. Por fortuna no hirió a nadie y solo hubo daños materiales que fue condenado por la población.
Ante estos hechos, la ciudadanía pide que llegue a la zona personal policial y del Ejército Peruano, para evitar los destrozos, ya que para mañana jueves se ha anunciado la llegada de más mineros y ataques a la comisaría e instituciones. La población señala que está de acuerdo con el cierre del Congreso y nuevas elecciones, pero que las protestas no deben ser violentas.
Autor: Jean Pierre Fernandez (jpfernandez@prensagrupo.com)